03 octubre 2009

La Casa de los Enamorados

Situada en medio de un gran parque repleto de flores y árboles frutales, surcado por numerosos senderos que formaban un verdadero laberinto, al fin hallé la Casa de los Enamorados.
Sobre un gran arco donde se enredaban rosales, en la parte superior del pórtico, un gran Ángel custodiaba el ingreso, portando arco y flecha: Cupido!, por supuesto…
Me recibió la pareja afectuosamente, y me invitaron a sentar en un gran sillón mullido y tapizado de rosa.
En la galería se podía divisar un enorme cuadro que mostraba una mujer y un hombre desnudos, en un jardín donde había un gran árbol de manzanas y por encima de ellos, asomándose, un Ángel bellísimo con sus alas desplegadas los Bendecía.
Eran sus antepasados, explicó ella, Adán y Eva, cuando aun vivían en el Jardín del Edén.
Al escuchar el relato, sentí dentro de mí la fuerza de todas las Evas y la seducción de todos los Adanes, me embriagó la sensación de estar enamorada.
Mientras bebíamos un néctar delicioso, de flores y frutas, observaba esta pareja donde no parecían estar nunca seguros de nada, no lograban decidirse si querían el zumo con azúcar o miel, si convidarme masas o pastel, si poner música o tocar el piano y así …
Cuando lograban ponerse de acuerdo se miraban con ojos húmedos y plenos de amor, transfigurándose de tal forma sus expresiones que me costaba distinguirlos.
No se que ingrediente tendría aquel sumo pero estuve confundida toda la tarde, y como en las nubes..
Caminamos por el jardín y era fácil perderse en las bifurcaciones de los senderos, en un momento, creí haberme extraviado y no sabía que camino tomar…

Una certeza extraña que venia desde mi corazón me indicaba el camino de la izquierda…lo seguí…

Era tarde, atardecía y el sol teñía de rosas y morados este fantástico lugar que parecía encantado.
Nos despedimos afectuosamente y prometí volver algún día…

Me obsequiaron para mi regocijo, una manzana tan roja como el corazón, pero me dijeron que no debería probarla..
Y aquí estoy, acabando de escribir mientras la miro y me parece cada vez mas tentadora…no se que consecuencias habrá de contravenir el consejo…pero creo que aquel fruto pronto me revelará algún secreto…



Bendiciones!
Ivana

4 comentarios:

Aurora Díaz dijo...

Ivana:

¡Que deleite de hogar y jardines!

Me encantó.

Aurora Díaz dijo...

¡Ivana, la manzana, el misterio!

Shonen dijo...

Eso, eso, el misterio, la decisión... Qué fué desvelado?

Preciosos los jardines, me asombró la "presencia" del cuadro.

Un abrazo

M. J. Verdú dijo...

Ivana, qué maravilla de entrada. La verdad es que la felicidad y el jardín de los enamorados da envidia. Tu trabajo te quedó fantástico, como siempre. Besos